9/10/2007

¡OH! ¡La sospecha! por Malú Kikuchi

Según el diccionario, “sospechar” quiere decir: 1) imaginar algo por conjeturas fundadas en apariencias o visos de verdad; 2) desconfiar, dudar, recelar. Hoy, en Argentina, los argentinos, sospechan. Y vivir en permanente estado de sospecha, además de ser incomodísimo, cansa y termina desmoralizando.

La sospecha puede ser creativa en si, pero no crea nada sólido ni positivo. La sospecha puede ser un acto de inteligencia, pero el estado de sospecha mantenido en el tiempo, nunca es inteligente. Cicerón (Marco Tulio, AC 106-43) decía que “cuanto mejor es uno, tanto más difícilmente llega a sospechar la maldad de los otros”.

Puede que los argentinos no seamos los mejores, pero la maldad de algunos nos ha obligado a ser los mejores en cuanto a sospechas se refiere. Lo más triste, lo que hasta ahora pareciera ser irremediable, es que el estado de sospecha en el que nos obligan a vivir, nunca se diluye, nunca desaparece. Y las sospechas se van sumando.

Entre las muchas policiales que escribiera Agatha Christie, hay una que recuerdo en particular. No es la mejor trama, ni la más ingeniosa, ni siquiera la mejor escrita, es más, recuerdo vagamente el argumento, pero no puedo olvidar el concepto central sobre el que giraba la novela.

El título lo dice todo: “Inocencia trágica”, y se basa en la monstruosidad que supone para los inocentes de un delito, ser sospechados de haberlo cometido. Si en cualquier grupo humano se comete un crimen y no se encuentra al culpable, todos aquellos que pudieran haberlo cometido son sospechosos. Y el ser sospechoso es una pesada carga para sobrellevar.

En el caso de la novela de Christie, los inocentes hacen lo posible y hasta lo imposible por probar su inocencia y salir del estado de sospecha. Es lo que corresponde, es lo que indica la lógica. Si alguien es inocente tiene más interés que nadie en que se pruebe su inocencia y se aleje de él toda sospecha.

Eso sucede en la novela de Agatha Christie. En la actualidad política argentina, no ocurre lo mismo. ¿Por qué? ¿Será que los sospechados no son tan inocentes?

Tres casos muy recientes que permiten sospechar. En los tres casos los sospechados en mayor o menor grado no parecen tener interés en demostrar que las sospechas no tienen asidero.

1) Daniel Scioli, candidato a gobernador de la provincia de Buenos Aires, si gana la elección, ya le ha ofrecido el cargo de Ministro de Seguridad de la provincia a Carlos Stornelli. Se dice que ya aceptó. Hoy, Stornelli es el fiscal de la causa Skanska, donde se acusa a la empresa sueca de haber pagado millonarias coimas para ganar la licitación de ampliación del gasoducto Norte. El caso Skanska se quedaría sin fiscal. ¿A quién le conviene?

2) Mauricio Macri, Jefe de Gobierno electo de la Ciudad de Buenos Aires, le ofreció a Guillermo Montenegro modificar la ley de Ministerios de la Ciudad para crearle un Ministerio de Seguridad y Justicia. Se dice que ya aceptó. Hoy, Guillermo Montenegro es juez de la causa Skanska en el tema de los sobornos pagados por la empresa a supuestos funcionarios del gobierno. El caso Skanska se quedaría sin juez. ¿A quién le conviene?

Dijo Ricardo Lorenzetti, presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación: “Antes el juez terminaba con el conflicto, ahora el conflicto termina con el juez”. Ya no sólo la política se mete con la justicia, la justicia se pasa a la política.

Curiosamente, ni Scioli, ni Macri, ni Stornelli, ni Montenegro intentan explicar algo. ¿Estos futuros nombramientos responden a algún acuerdo tramado a espaldas de la gente? ¿Los nombran realmente porque los creen idóneos para el cargo, o están pagando favores? ¿Lo hacen porque el Ejecutivo se los pidió? ¿El objetivo es retrasar la causa Skanska? Los argentinos, sospechan. Tienen motivos para hacerlo.

3) Las elecciones en Córdoba. Las encuestas ya se han convertido en un clásico: se equivocan. ¿Se equivocan en serio porque hacen mal las preguntas o manipulan a la población a pedido de los que las contratan? Los argentinos sospechan. Tienen sobrados motivos para hacerlo.

El resultado de la elección cordobesa quedó muy lejos de las cifras de las encuestas. Ocurrieron hechos anormales durante el recuento. Demasiados hechos que a esta altura de las sospechas ya no se sabe si son ciertos o están en el imaginario popular. La sospecha es gravísima. Se sospecha ¡fraude!

Oficialmente Juan Schiaretti gana la gobernación por poco más de un punto sobre Luis Juez. Schiaretti es hoy vicegobernador de Córdoba y Juez es hoy intendente de Córdoba capital. Juez grita ¡fraude!, pide abrir las urnas y contar los votos de a uno. El gobierno de la provincia, a través de la justicia (¿estará manejada la justicia por el ejecutivo?, una sospecha más), sigue con el escrutinio final, contando sólo las actas.

¿No sería lógico que tanto Schiaretti como el gobernador De la Sota y Eduardo Di Cola (a cargo del Correo Nacional que es el responsable del recuento de votos) fueran los más interesados en establecer su inocencia e instaran a abrir las urnas y alejar toda sospecha del triunfo de Schiaretti? Los dos primeros hablan públicamente, se quejan de las denuncias de Juez, reivindican la democracia ¿?, declaman inocencia, pero no la demuestran. Los argentinos sospechan. Los motivos para hacerlo aumentan por minutos.

Los argentinos viven en un permanente estado de sospecha con respecto al gobierno. Una sospecha corrosiva, viscosa, maligna, que no se disipa. Esta terrible clase de sospecha no tendría cabida en una verdadera república. La sospecha en cuanto a ciertos actos de la política, se acrecienta con el correr de los días y de los hechos. Y así, sospechando, los argentinos se preparan para votar en las elecciones nacionales del 28 de octubre.

El Presidente pide llenar las urnas con memoria el 28 de octubre. Haga memoria. Sume las sospechas y vote. Su voto puede alejar para siempre, con un nuevo gobierno electo, las sospechas de pactos inconfesables, arreglos a espaldas de la gente, aprietes a la justicia y burlas a la voluntad popular. De Usted depende.

Gentileza en exclusiva de www.lacajadepandoraonline.com para NOTIAR