3/31/2007

DIA DE LA MEMORIA

El 24 de Marzo de 1976 algunos éramos jóvenes; otros, niños; y varios de nosotros aún no habíamos nacido. Pero ese día todos juntos fuimos lanzados violentamente al dolor, al miedo, a la soledad.

Cinco golpes militares en 36 años nos habían preparado para aceptar a la dictadura militar como algo natural, algo que sucedía cada tanto; nadie imagino que tanto horror seria posible.

Hace treinta años fuimos condenados, sin juicio, por haber tomado conciencia de que vivíamos en un mundo injusto, por haber denunciado que había ricos muy ricos y pobre muy pobres, países que dominaban a otros a su antojo, y la arbitrariedad con que los gobernantes de turno ejercían el poder que les habíamos dado con nuestros votos.

Fuimos criminales por practicar la solidaridad, por alfabetizar, por organizarnos en las fabricas, en las escuelas, por levantar casas en las villas, por repartir remedios, por ayudar con la tarea a los chicos, por leer, por hablar, por pensar.

Nuestra condena fue el secuestro, la tortura, el asesinato a treinta mil argentinos médicos, estudiantes, gremialistas, monjas, sacerdotes, maestros, políticos, periodistas, artistas, escritores, obreros, conscriptos, niños, y el silencio de un pueblo por terror había aprendido a marcar el paso.

Todo en forma secreta y clandestina.

No fueron errores ni excesos. Fue un plan fríamente planeado para liquidar a todos aquellos que ponían en peligro este modelo salvaje que todavía rige en nuestra vida y que nos dice como una verdad absoluta e indiscutible que siempre ha habido y habrá pobres. Un plan que atravesó todo nuestro continente.

Sra Malú:
Este panfleto se lo hicieron pegar a mi hijo en un colegio municipal en la ciudad de Buenos Aires.
Por favor le pido que lo comente. Soy habitual oyente de su valiente programa, disculpe por no poner mi apellido pero por mi lugar de trabajo y la identidad de mi hijo se me hace imposible. Muchas veces dejo mensajes en su programa.
La felicito a usted y a su equipo por defender la libertad y lo poco que nos queda de República.
Soy “Pablo” de Capital.

3/29/2007

¿QUIEN TIENE LA CULPA? por Santiago Varela

La culpa de todo la tiene el ministro de Economía dijo uno. ¡No señor! dijo el ministro de Economía mientras buscaba un mango debajo del zócalo.
La culpa de todo la tienen los evasores. ¡Mentiras! dijeron los evasores mientras cobraban el 50 por ciento en negro y el otro 50 por ciento también en negro.
La culpa de todo la tienen los que nos quieren matar con tanto impuesto. ¡Falso! dijeron los de la DGI mientras preparaban un nuevo impuesto al estornudo.
La culpa de todo la tiene la patria contratista; ellos se llevaron toda la guita. ¡Pero, por favor...! dijo un empresario de la patria contratista mientras cobraba peaje a la entrada de las escuelas públicas.
La culpa de todo la tienen los de la patria financiera. ¡Calumnias! dijo un banquero mientras depositaba a su madre a siete días.
La culpa de todo la tienen los corruptos que no tienen moral. ¡Se equivoca! dijo un corrupto mientras vendía a cien dólares un libro que se llamaba "Haga su propio curro" pero que, en realidad, sólo contenía páginas en blanco.
La culpa de todo la tiene la burocracia que hace aumentar el gasto público. ¡No es cierto! dijo un empleado público mientas con una mano se rascaba el pupo y con la otra el trasero.
La culpa de todo la tienen los políticos que prometen una cosa para nosotros y hacen otra para ellos. ¡Eso es pura maldad! dijo un diputado mientras preguntaba dónde quedaba el edificio del Congreso.
La culpa de todo la tienen los dueños de la tierra que no nos dejaron nada. ¡Patrañas! dijo un terrateniente mientras contaba hectáreas, vacas, ovejas, peones y recordaba antiguos viajes a Francia y añoraba el placer de tirar manteca al techo.
La culpa de todo la tienen los comunistas. ¡Perversos! dijeron los del politburó local mientras bajaban línea para elaborar el duelo.
La culpa de todo la tiene la guerrilla trotskista. ¡Verso! dijo un guerrillero mientras armaba un coche-bomba para salvar a la humanidad.
La culpa de todo la tienen los fascistas. ¡Malvados! dijo un fascista mientras quemaba una parva de libros juntamente con el librero.
La culpa de todo la tienen los judíos. ¡Racistas! dijo un sionista mientras miraba torcido a un coreano del Once.
La culpa de todo la tienen los curas que siempre se meten en lo que no les importa. ¡Blasfemia! dijo un obispo mientras fabricaba ojos de agujas como para que pasaran diez camellos al trote.
La culpa de todo la tienen los científicos que creen en el Big Bang y no en Dios. ¡Error! dijo un científico mientras diseñaba una bomba capaz de matar más gente en menos tiempo con menos ruido y mucho más barata.
La culpa de todo la tienen los padres que no educan a sus hijos. ¡Infamia! dijo un padre mientras trataba de recordar cuantos hijos tenía exactamente.
La culpa de todo la tienen los ladrones que no nos dejan vivir. ¡Me ofenden! dijo un ladrón mientras arrebataba una cadenita a una jubilada y, de paso, la tiraba debajo del tren.
La culpa de todo la tiene los policías que tienen el gatillo fácil y la pizza abundante. ¡Minga! dijo un policía mientras primero tiraba y después preguntaba.
La culpa de todo la tiene la Justicia que permite que los delincuentes entren por una puerta y salgan por la otra. ¡Desacato! dijo un juez mientras cosía pacientemente un expediente de más de quinientas fojas que luego, a la noche, volvería a descoser.
La culpa de todo la tienen los militares que siempre se creyeron los dueños de la verdad y los salvadores de la patria. ¡Negativo! dijo un coronel mientras ordenaba a su asistente que fuera preparando buen tiempo para el fin de semana.
La culpa de todo la tienen los jóvenes de pelo largo. ¡Ustedes están del coco! dijo un joven mientras pedía explicaciones de por qué para ingresar a la facultad había que saber leer y escribir.
La culpa de todo la tienen los ancianos por dejarnos el país que nos dejaron. ¡Embusteros! dijo un señor mayor mientras pregonaba que para volver a las viejas buenas épocas nada mejor que una buena guerra mundial.
La culpa de todo la tienen los periodistas porque junto con la noticia aprovechan para contrabandear ideas y negocios propios. ¡Censura! dijo un periodista mientras, con los dedos cruzados, rezaba por la violación y el asesinato nuestro de cada día.
La culpa de todo la tiene el imperialismo. Thats not true! (¡Eso no es cierto!) dijo un imperialista mientras cargaba en su barco un trozo de territorio con su subsuelo, su espacio aéreo y su gente incluida. The ones to blame are the sepoy, that allowed us to take even the cat (la culpa la tienen los cipayos que nos permitieron llevarnos hasta el gato). ¡Infundios! dijo un cipayo mientras marcaba en un plano las provincias más rentables.
La culpa de todo la tiene Magoya. ¡Ridículo! dijo Magoya acostumbrado a estas situaciones.
La culpa de todo la tiene Montoto. ¡Cobardes! dijo Montoto que de esto también sabía un montón.
La culpa de todo la tiene la gente como vos por escribir boludeces. ¡Paren la mano! dije yo mientras me protegía detrás de un buzón. Yo sé quién tiene la culpa de todo.
La culpa de todo la tiene El Otro. ¡El Otro siempre tiene la culpa! ¡Eso, eso! exclamaron todos a coro. El señor tiene razón: la culpa de todo la tiene El Otro. Dicho lo cual, después de gritar un rato, romper algunas vidrieras y/o pagar alguna solicitada, y/o concurrir a algún programa de opinión en televisión (de acuerdo con cada estilo), nos marchamos a nuestras casas por ser ya la hora de cenar y porque el culpable ya había sido descubierto. Mientras nos íbamos no podíamos dejar de pensar:

¡Qué flor de guacho que resultó ser El Otro...!

3/26/2007

La inevitable tragedia argentina: 24 de Marzo 1976. Por Malú Kikuchi

Lo escribí el año pasado. Nada ha sucedido desde entonces que me incline a cambiar una sola coma de lugar. Agradecemos el feriado del 24 de marzo, abona a favor de nuestros argumentos. La única pregunta sería ¿porqué no es transferible este feriado?


El 20 de junio lo es, así como el 17 de agosto, ¿son acaso las muertes de los “maravillosos muchachos idealistas” más significativas que la de Belgrano y San Martín?

En algunas novelas policiales, hechos y actores, desde diversos puntos, convergen inexorablemente hacia el minuto 0. Ese minuto en que comienza o termina la historia. A lo largo y a lo ancho de la Argentina, hechos y actores, a través del tiempo, convergieron, con lo inevitable de la tragedia griega, hacia el 24 de marzo de 1976.

¿Cuándo empieza a gestarse esta historia de injusticias, terror, represión y horror?

Las versiones abundan, pero como hay que darle un principio, supongamos que todo se inicia con la proscripción del peronismo por parte de la Revolución Libertadora de 1955.

Los argentinos, muy inclinados hacia las soluciones mesiánicas, de un plumazo y por decreto, decidimos que más de la mitad de la población no podía elegir a sus gobernantes. Pasaron los gobiernos de facto, fueron seguidos por gobiernos democráticos, volvieron los de facto y otra vez los democráticos, y el peronismo siguió proscripto.

A pesar de la proscripción ganó todas las elecciones, votando en blanco, absteniéndose o sumándose a un candidato extra partidario. La clase gobernante del momento, no lo registró.

El resultado, previsible, fue un feroz resentimiento que se fue plasmando en acciones de guerrilla en contra de gobiernos no del todo legítimos. Y la guerrilla tiene, en el imaginario popular, un cierto halo de romanticismo, ese halo que rodea una lucha justa.

Quizás esa fue la razón que permitió que la sociedad toda mirara, en sus comienzos, con cierta simpatía la guerrilla. Una guerrilla que actuaba en lugares lejanos y que le era ajena. Una guerrilla que actuaba sin razones económicas o sociales. Recordemos que el Cordobazo lo llevan a cabo los obreros mejor pagos de la Argentina, una Argentina emblemática en América Latina, una Argentina de sólida y creciente clase media, una Argentina alfabetizada, sin hambre y con baja mortalidad infantil.

El presidente Lanusse permite que el partido peronista compita en las elecciones de 1973. La guerrilla para ese entonces ya ha cometido algunos hechos aberrantes que han sido debidamente juzgados y penados por los tribunales.

Finalmente llega el 11 de marzo de 1973. La fórmula del FREJULI, Héctor J. Cámpora /Vicente Solana Lima gana la elección con el 49,56% de los votos. La noche del 25/05/1973, una pueblada avalada y permitida por Cámpora y Righi (ministro del Interior) libera a los guerrilleros presos en Devoto. Ya no habrá jueces dispuestos a juzgar hechos de violencia política.Ya no están proscriptos.
Ya son gobierno. Ya no hay razones para la guerrilla. Y sin embargo, hasta con Perón presidente, los actos ilegales continúan, es más, crecen en cantidad y poder de destrucción. La guerrilla deja de ser tal y se convierte en terrorismo. Un terrorismo bien armado que obliga a Perón a definirlo en términos durísimos.

El ataque a la Guarnición de Azul la noche del 19 de enero de 1974 por parte de los terroristas hace que Perón se dirija a los Señores Jefes, Oficiales, Suboficiales y Soldados de la guarnición en estos términos: “Quiero hacerles presente que esta lucha en la que estamos empeñados, es larga y requiere en consecuencia una estrategia sin tiempo.

La estrategia integral que conducimos desde el gobierno, nos lleva a actuar profundamente sobre las causas de la violencia y la subversión, quedando la lucha contra los efectos a cargo de toda la población, fuerzas policiales y de seguridad, y si es necesario de las FFAA.

Teniendo en nuestras manos las grandes banderas o causas que hasta el 25/05/1973 pudieron esgrimir, la decisión soberana de las grandes mayorías nacionales (61,85%) de protagonizar una revolución en paz y el repudio unánime de la ciudadanía, harán que el reducido número de sicópatas que va quedando sea exterminado uno a uno para el bien de la República(22/01/1974)”.

El viejo General, enfermo y cansado, los echa de la plaza de Mayo llamándolos “estúpidos imberbes”. Perón muere el 1º de julio de 1974. El caos crece. El gobierno de Isabelita se tambalea. Casi pide que lo destituyan. El Rodrigazo (la feroz devaluación de Celestino Rodrigo, ministro de economía) empobrece a la sociedad. El poder de acción destructiva del terrorismo avanza por minutos.

El gobierno da respuesta de la peor manera posible, creando ilegalmente, la triple A de López Rega. Los decretos (legales) 2770/1/2 del 6/10/1975 firmados por Lúder y Ruckauf, ordenan el “aniquilamiento del accionar subversivo.”

La oposición no encuentra soluciones políticas viables. Se intenta reemplazar a Isabelita por Lúder. No se puede, Isabelita no renuncia. Mientras, el terrorismo convierte a la Nación en un lugar inseguro para vivir y fácil para morir. Asesinatos, secuestros, atentados, son noticias cotidianas (más de 6.000 hechos, 916 muertos).

El clima es irrespirable. La muerte está en cualquier esquina. La población, lo sabe. Lo padece. La civilidad no encuentra respuesta. Todas las miradas se dirigen hacia las FFAA. Los argentinos, en una inmensa mayoría, creen que las FFAA son la única solución posible. Los medios hablan del golpe por venir con la misma naturalidad que describen los atentados terroristas. El golpe es inminente. La población lo pide. El golpe llega.

24 de marzo de 1976. Todos los factores y los actores, por acción u omisión contribuyeron a lo inevitable, al golpe del 24 de marzo de 1976. Nadie, ni de un lado ni del otro, nadie, ni siquiera aquellos que no se interesaban por la realidad que los rodeaba, están exentos de culpa. Todos fuimos responsables del 24 de marzo del 76. No todos fuimos responsables de lo que siguió.

El terrorismo sin razones de ningún tipo y la represión ilegítima, son el anverso y el reverso de una política sin límites, desbordada, fuera de todo aquello que puede considerarse humano. Pero..., la represión vino después. El 24 de marzo del 76, la población, festejó.

La Opinión, tapa, 27/03/76, Jacobo Timerman: “Si los argentinos, como se advierte en todos los sectores –aún dentro del ex oficialismo- , agradecen al Gobierno Militar el haber puesto fin a un vasto caos que anunciaba la disolución del país....”

La Prensa, 27/03/76. Título: “Orden, seguridad, confianza. ...Las FFAA lo hicieron para salvar un tremendo vacío de poder.”

La Nación, 25/03/76, “Este final inexorable había sido presentido por vastos sectores de la opinión pública.”

Jorge Luis Borges, 19/05/76. “Le agradecí (a Videla) personalmente el golpe del 24 de marzo que salvó al país de la ignominia....”

Ernesto Sábato, 19/05/76. “El Gral. Videla me dio una excelente impresión. Se trata de hombre culto, modesto, inteligente. Me impresionó la amplitud de criterio y la cultura del presidente.”

Ernesto Sábato, 1978, revista alemana GEO : “La inmensa mayoría de los argentinos rogaba casi por favor que las Fuerzas Armadas tomaran el poder. Todos nosotros deseábamos que se terminara ese vergonzoso gobierno de mafiosos....

"Sin duda alguna en los últimos meses muchas cosas han mejorado en nuestro país: las bandas terroristas han sido puestas en gran parte bajo control.”

El 24 de marzo de 1976, la población, mayoritariamente, festejó.
Gentileza en exclusiva de www.lacajadepandoraonline.com para NOTIAR

3/15/2007

Hugo Chávez, un Napoleón en el Trópico . Por Julio Cirino

Mientras tanto la población aguarda que los logros de la Revolución Bolivariana se materialicen más allá de los anuncios. La pobreza en 1998 afectaba al 50,4 % de la población; la indigencia al 20,3%. Para 2005 abarca al 48,8% y el 20,3 respectivamente. No precisamente un logro apabullante.

"…Yo creo que debemos comenzar a hablar de una fuerza armada sudamericana, latinoamericana (…) por que la unión tiene que llegar a todos los espacios…" esto declaraba Hugo Chávez el pasado 10 de marzo durante su paso por Bolivia en medio de la última gira regional.Y no es la primera vez que el bolivariano insiste en la idea de crear una especie de organización del tratado del atlántico sur, para que se convierta en el brazo militar del Socialismo del Siglo XXI.
Hasta ahora no pudo avanzar demasiado con la idea, lo que no significa que la integración militar con Cuba o el acelerado avance en Bolivia o Nicaragua no sean pasos en el sentido que desea.Es más, hasta se elaboró toda una doctrina que explica no sólo que la invasión imperialista es inminente (desde hace unos años) sino además para qué viene y cómo habrá que rechazarla.


Es más, hasta se elaboró toda una doctrina que explica no sólo que la invasión imperialista es inminente (desde hace unos años) sino además para qué viene y cómo habrá que rechazarla.

Vienen a robarse los "recursos naturales", en el caso de Venezuela, el petróleo. ¿Cómo rechazarlos? Merced a la "guerra asimétrica" o como lo llaman los cubanos, la "guerra de todo el pueblo". Insistió tanto en la invasión que se viene que no falta quien le tome en serio (o aparente hacerlo) no importa que la noción misma de una invasión en un hemisferio que, con todos sus problemas, vive básicamente en paz, al menos en lo que toca a conflictos armados interestatales, sea un dislate sin remedio en este momento histórico.


El rechazo militar del invasor involucraría, en su primera etapa, a las fuerzas regulares del nuevo ejército (ahora "ejército bolivariano") que (se concede graciosamente) no podría derrotar a las "tropas imperiales" pero cuando estas ocuparan el territorio, las milicias populares y los restos reorganizados de los regulares, comenzarían una versión tropical de la guerra asimétrica de hostigamiento que concluiría en el largo plazo por desgastar y desangrar al invasor.

Lo curioso de esta noción de la invasión para robar los recursos naturales es que se repite tratando de darle visos de seriedad tanto en Argentina como en Bolivia; en el primer caso, la invasión (al parecer también invadirán Argentina) tendría como objetivo el "robo del agua"; en Bolivia sería el gas. Por supuesto, la Organización de Estados Americanos (OEA) y el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas… bien gracias…


Mientras tanto, la militarización de la vida política, de la sociedad y sobre todo de niños y jóvenes continúa aceleradamente, se creó en 2005 una fuerza de "milicias" que aspira a llegar a 1.000.000 de hombres y mujeres, estas tienen un sistema de comando paralelo a las tropas regulares y dependen directamente del presidente Chávez; las camisas esta vez no son pardas o negras, son rojas, pero la idea detrás de ellas es casi la misma.


La Venezuela bolivariana se arma de todas las armas: La fiebre de compras se inició casi con timidez, unos 100.000 rifles de asalto Kalashnikov AK-103 (de los cuales ya se recibió la mitad). Mantenimiento y repotenciación de 410 camiones fabricados por la austríaca Steyr y 300 más de la Fiat IVECO, conformaron los "canapés" para abrir el apetito.


Pero el espiral se desató a partir de 2004, para el año siguiente, sólo como ejemplo digamos que, Venezuela fue el quinto comprador mundial de armas. Primero la India, por valor de 5400 millones de dólares; segundo Arabia Saudita con 3.400; tercera China, con 2.800; cuarto Emiratos, 2.200 y quinto Venezuela con 1.900 millones de dólares (fuente: Military Balance 2006). En 2005 como la invasión estaba "ad portas", se compra el último modelo de radar para defensa aérea --3D-- a China (la denominación técnica es JYL-1) se adquirieron tres por 150 millones de dólares más un centro de Comando Y Control, más repuestos, entrenamiento y el leasing de un sistema de comunicación satelital.


La objeciones puestas por Estados Unidos a la transferencia de equipos militares que tuvieran componentes propios, no tardó en dejar fuera del tour de compras a los mayores fabricantes de la Unión Europea, que además tienen ahora leyes bastante estrictas en cuanto al pago de "comisiones". En 2006 Rusia entregaba a Venezuela, seis helicópteros pesados MI-17v5; tres helicópteros de ataque de última generación MI-35M y un MI-26 Halo, el más grande que vuela en el mundo, capaz de levantar 20 toneladas. El costo de este "combo" fue de unos 130 millones de dólares.


Pero hay ordenado otro paquete de 38 helicópteros más que se comenzarán a recibir en este año, son MI-17v5 y MI-35M por un total de 500 millones de dólares. A finales del año pasado en un desfile aéreo se mostraron en Caracas los dos primeros interceptores Sukhoi (SU 30- MK2) comprados a Rusia en un paquete de 24 a un costo de 40 millones cada uno (dependiendo de los opcionales) lo que totaliza unos 960 millones.


Todas estas compras no van a promover sino desconfianzas e inestabilidad en la región, lo que en definitiva puede que no concluya en una carrera armamentista, si prevalece el buen sentido, pero ya está generando gastos bélicos que podrían emplearse con mejores fines.

Ahora bien, el nuevo equipamiento, que demorará años en estar totalmente operativo y con el personal entrenado para operarle, sería irrelevante en el marco de una confrontación con la superpotencia; en este escenario, las operaciones las iniciarían ataques de precisión con misiles tipo harpoon lanzados desde aviones o submarinos, ataques aéreos "invisibles", la destrucción de los centros de comando y control y las pistas de despegue, destruirían al 90% de estos aparatos en el suelo. El remanente, si lo hubiera, carente de sistemas tipo AWACS serían patos en un barril. Millones de dólares tirados a la basura.


Pero como, a pesar de todo, las compras continúan están en pleno desarrollo las conversaciones para adquirir, también de Rusia, los sistemas misilísticos antiaéreos móviles THOR-1, los más avanzados que Rusia tiene a la venta y cuyo precio aún se desconoce.


También fue anunciada la intención de adquirir 9 submarinos de última generación compra por la que puede competir Alemania, Francia y también Rusia con los Amur 950 (unos 150 millones de dólares cada uno) hasta ahora el favorito, dotado de un nuevo sistema de propulsión que no requiere de snorkel para la recarga de las baterías por lo que puede permanecer sumergido alrededor de un mes.


Mientras tanto la población aguarda que los logros de la Revolución Bolivariana se materialicen más allá de los anuncios. La pobreza en 1998 afectaba al 50,4 % de la población; la indigencia al 20,3%. Para 2005 abarca al 48,8% y el 20,3 respectivamente. No precisamente un logro apabullante.

La caída de la producción petrolera llevó la misma de 3 millones de barriles diarios en 1998 a 2,5 millones en 2006, claro que ahora la petrolera estatal PDVSA se convirtió en una empresa en la que según su propio director sólo pueden trabajar "revolucionarios". El 45% del presupuesto del país depende de los ingresos generados por el petróleo pero el producto bruto per cápita que entre 1994 y 1998 promediaba los 5.584 dólares cae entre 1999 y 2005 a 5.121 dólares. La distribución del ingreso no mejora demasiado a pesar de la Revolución Bolivariana. En 1998 el ingreso total del 20% más rico era del 50,7% del PBI y el del 20% más pobre era del 4,4%. Para 2005 estas cifras son del 52,5% y 3,7% respectivamente por lo que la "distribución" no parecería estar funcionando.


La "invasión" hace que por cada bolívar que se use en el Ministerio de Interior y Justicia, se gastan 112 en el de Defensa; si lo vemos en dólares per cápita en la región, México gasta 30,1; Argentina 43,6; Brasil 70,7; Colombia 134,7 y Venezuela encabeza la lista con 155,4 dólares. Los índices de desempleo de 2005 son del 13% que se reduce al 9% cuando se computa como empleados a quienes reciben subsidios vía "las misiones".

http://www.eldiarioexterior.com/noticia.asp?idarticulo=13500

3/14/2007

Chávez: Piquetero en Buenos Aires. Por Manuel Malaver

Es fácil atribuir la atracción fatal entre los presidentes de Venezuela, Hugo Chávez, y el de Argentina, Néstor Kirchner, a que el primero oxigena (sin pedir factura) las malas cuentas de las finanzas argentinas con petrodólares del todavía en auge ciclo alcista de los precios del crudo venezolano, y no a la identidad profunda que liga al caudillo del cercano norte a su par del lejano sur, en temas referentes a los liderazgos fuertes, la insustancialidad de la democracia y la urgencia de torcer el brazo, sino partírselo, al poderío político, económico y militar de los Estados Unidos.


Todo lo cual, es cierto, expulsa a Chávez y a Kirchner del infierno de la política post guerra fría que obliga a los jefes de estado a trabajar, producir resultados y dar cuenta de sus gestiones a los electores, pero para refugiarlos en el paraíso donde gobernar es tomar fusil y morral retóricos e irse por el mundo a liberar cautivos, socorrer viudas, proteger huérfanos, dar de comer al hambriento, vestir al desnudo y preparar o hacer una revolución que estaría a la vuelta de la esquina.


Mientras tanto, en las calles de Caracas y Buenos Aires, en las ciudades, pueblos y campos de Argentina y Venezuela, millones de pobres se hacinan sin cobijo, pan, ni seguridad social, en el espectáculo pocas veces visto de que, quienes los olvidan y tienen en el peor abandono, son precisamente dos redentores que no pierden oportunidad para lanzar bravatas a favor de la justicia y la igualdad social.



Por eso no es exagerado afirmar que tanto Kirchner, como Chávez, consiguieron la fórmula perfecta para gobernar con resultados diametralmente opuestos a los que proponen, pero rodeados de multitudes que los aclaman, tienen como a sus libertadores y se preparan a convertirlos en los fundadores de las primeras monarquías dinásticas de la historia post colonial de América latina.


Porque es que si nos situamos en la perspectiva que en cuestión de meses convertirá a Venezuela en una sociedad y un estado con un presidente que podría optar por la reelección indefinida (detalle que tiene a Chávez pensando en cuál de sus hijos menores, o nietos mayores lo sucederá), y que la muy revolucionaria y pizpireta esposa de Néstor Kirchner, Cristina, se prepara a participar en las elecciones del año próximo como candidata de una alianza entre una facción peronista y el kirchnerismo que seguramente le garantizará el triunfo, entonces aterrizamos en el escenario por el que las patrias de Bolívar y San Martín ensayan a troquelar al estado de derecho en un cascarón vacío donde cabe de todo.


Ya por lo menos Chávez logró durante los 8 años en que ejerce en Venezuela una presidencia que ha liquidado la independencia de los poderes y aspira a transformar en vitalicia y hereditaria, ser aceptado como caudillo armado y legislador, que, aparte de ser el comandante en jefe de las fuerzas civiles y militares, tiene facultades para anular leyes viejas y redactar nuevas, tratar el propio texto de la constitución vigente como si fuera la tarea de un niño de primer grado que apenas aprende a leer y escribir, y bajar de los cielos con las tablas de la ley, pero no una vez, sino cuantas veces juzgue necesario.


O sea, que la utopía constitucional venezolana se guiará de ahora en adelante por los cambios de humor del caudillo civil, militar y legislador, quien podrá de acuerdo a sus constantes cambios de humor, redactar una constitución para cada día…si le place.


No anduvo tan rápido el caudillo patagón, pero no se piense que por falta de ganas y vocación, sino quizá porque estando aun muy frescas las heridas que la más perversa, criminal y feroz dictadura militar sudamericana dejó en la Argentina, hay que andarse con cuidado.


De todas maneras, y por sobre estas diferencias que corregirá el tiempo, Chávez y Kirchner comparten el mismo temperamento, son volátiles e intemperantes por simplificadores, y con frecuencia se muestran decididos a imponer “sus verdades” aun contra la terquedad de las evidencias.


De ahí que no sean amigos de la libertad de expresión, ni de los periodistas, ni de nadie que tenga el coraje de interrumpirlos y preguntarles: “Pero presidente ¿de dónde sacó usted esas estadísticas”?


Siguen entonces las descalificaciones, las amenazas, acusaciones como que el atrevido “cumplía” órdenes de los dueños del medio y de los imperialistas, o una respuesta que ha inventado Chávez y conoce enorme éxito entre los presidentes autoritarios que padecen por sistemas de gobiernos concentracionarios, de reelección indefinida y vitalicios: “Bueno, periodista esas son mis estadísticas, que tienen derecho a ser tan “verdaderas” como las suyas. O sea, que yo tengo tanto derecho a decir “mi verdad” como usted la suya. Y como tiene que haber una, vayamos a las masas para que sean ellas las que decidan”.


Solución que no estará ni mal si no fuera porque Chávez tiene el poder para encadenar la televisión y la radio en Venezuela hasta por 8 horas diarias y desde donde puede difundir “su verdad” con una ventaja que no se le habría ocurrido ni a Goebbles.


En cuanto a Kirchner es verdad que no ha llevado las cosas a tanto ¿pero qué hay de la actual visita de Chávez a Buenos Aires y cuya finalidad mayor fue presidir un mitin convocado el viernes por piqueteros argentinos para protestar contra la visita que este fin de semana efectuó el presidente norteamericano, George Bush, a sus colegas de Brasil y Uruguay, Luiz Inácio Lula da Silva y Tabaré Vásquez?


¿Más que una protesta contra el invitado, no era contra los invitantes? ¿Y cómo queda la amistad y solidaridad de Chávez y Kirchner contra dos presidentes hermanos como Tabaré Vásquez y Lula da Silva, que no solo son socios de los protestantes en el Mercosur, sino que son presentados como miembros fundamentales en una santa alianza revolucionaria con la cual presuntamente harán morder el polvo de la derrota al capitalismo, al imperialismo y los Estados Unidos?

¿No gritaba Chávez hasta hace muy poco tiempo “alerta, alerta que camina, la espada de Bolívar por América latina”, como forma de anunciar que los países sudamericanos habían retomado el camino de la revolución y el socialismo y ya sería imposible desviarlos del sueño de un subcontinente autárquico, etnocéntrico, antiimperialista y socialista?


¿Pero cómo es entonces que dos de los más importantes líderes de la región, Lula da Silva y Tabaré Vásquez, recibían al jefe del imperio, al terrorista y genocida George Bush y hacían oídos sordos a las alharacas que Kirchner y Chávez estaban protagonizando en Buenos Aires?


Bueno porque sencillamente la izquierda y el socialismo en Sudamérica requieren otra política que no sea la de los caudillos del Norte y el Sur, la de los Chávez y Kirchner que simplemente utilizan la necesaria urgencia de que los pobres mejores su suerte, pero para establecer dictaduras dinásticas y vitalicias como las que ya conocieron y padecen la Corea del Norte de Kim Jon-IL y la Cuba de Fidel Castro.

3/13/2007

¿Quién explica lo inexplicable? por Malú Kikuchi

“Pido a los Santos del Cielo
que ayuden mi pensamiento […]
que refresquen mi memoria
y aclaren mi entendimiento”


Como Martín Fierro, necesito ayuda. La mayoría de los argentinos necesitamos ayuda. Se podría suponer que el resto del planeta Tierra necesita ayuda para explicar … lo inexplicable.

¡Cómo explicar que el Presidente de Venezuela, con permiso y anuencia del Presidente de Argentina, venga al país a hacer un show colorido, populista, demagógico y absolutamente agraviante …dedicado al Presidente de los EEUU, de visita en la República Federativa del Brasil y la República Oriental del Uruguay! ¿Cómo explicarlo?

Según el diccionario, “explicar” significa: dar a conocer la causa o motivo de algo; llegar a comprender la razón de algo, darse cuenta. “Inexplicable”, quiere decir: que no se puede explicar. Lo que pasó en la cancha de Ferro, barrio de Caballito, Ciudad de Buenos Aires, ¿República? Argentina, el viernes 9 de marzo 2007, es absolutamente INEXPLICABLE.

Las preguntas son muchas. No hay respuestas coherentes a esas preguntas. ¿Existe alguna razón para que el Presidente Argentino quiera insultar y agraviar al Presidente de los EEUU? La lógica dice que no, la historia, la política y la diplomacia más elemental, dicen que no, que no hay razones. Pero, si esa razón existiera, el Presidente Kirchner debería asumir el riesgo de hacerlo el mismo y no a través de otra persona con la que ni siquiera comparte la nacionalidad argentina. Inexplicable.

Si al Presidente Chávez no le alcanza su bolivariana Venezuela para insultar al Presidente de los Estados Unidos, ¿por qué elige a la Argentina como sucursal del agravio? ¿Por qué no lo hace desde México, o desde Perú, Colombia o Chile? Ha de ser porque los países serios, esos que no usan la seriedad como eslogan electoral (son serios en serio), no se lo permitirían. La Argentina se lo permite. Inexplicable.

¿La Argentina del Presidente Kirchner se lo permite porque Venezuela es el único comprador de bonos argentinos, (lo que le reditúa al Gobierno venezolano buenas ganancias)? Aclaremos que nuestro tan cacareado divorcio del FMI nos ha costado un carísimo casamiento con Chávez, que nos cobra intereses sensiblemente más altos que el Fondo. Inexplicable.

¿La Argentina del Presidente Kirchner le permite cualquier cosa al Presidente Chávez porque comparte su ideología del socialismo para el siglo XXI? No es fácil de aceptar cuando Kirchner declama su imperiosa necesidad de tener un fuerte empresariado autóctono, respeta las concesiones petroleras, aeroportuarias, camineras y todas aquellas donde los amigos estén bien representados.

Chávez es abiertamente antisemita, Kirchner no lo es. Chávez insulta a los EEUU mientras les vende el 60% de su petróleo, les compra el 30% de sus importaciones y siempre, en cualquier lugar, se aloja en el Sheraton de turno. No es el caso del Presidente Argentino. No tenemos, desgraciadamente tanto comercio con los EEUU y al parecer, Kirchner no tiene cadena de hoteles preferidos. Entonces, ¿por qué? Inexplicable.

Por la razón que fuera, la Argentina permitió que Chávez reuniera a toda la izquierda local, movimientos sociales, piqueteros, madres de Plaza de Mayo, algunos diputados (oficialistas), músicos y cantantes progres, banderas argentinas con Evita y el Che (¿¿¿???), llevados “espontáneamente” con 436 micros, que llenaron el estadio de Ferro. Se vio por CNN. El planeta lo vio. Inexplicable.

La presentación del acto estuvo a cargo de “la madre” del Presidente Argentino, Hebe de Bonafini, que le agradeció efusivamente a su “hijo” el permitirles hacer el acto en libertad. Luego Chávez insultó a Bush.. Lo trató de cadáver político,- todo presidente americano lo es en la mitad de su segundo y último mandato-, e hizo una curiosa mezcla de Bolívar, Washington, el imperialismo, la pobreza, la dignidad, Kirchner, las crisis, todo rejuntado en un largo, largísimo discurso tropical, mechado de chistes para la platea. Todos lo vieron o por lo menos, todos se enteraron. ¡Qué vergüenza! ¡Qué vergüenza para la Argentina! Inexplicable.

Mientras Chávez, desde su atalaya argentino, agraviaba al Presidente de la más poderosa nación de la Tierra, de paso, insultaba a los presidentes de los países que estaban en el itinerario de visitas de Bush. Quedamos, gratuitamente y en un solo acto, mal con los EEUU, con Brasil y con el Uruguay. Inexplicable.

Dicen que el acto costó $600.000. ¿Quién los pagó? ¿Venezuela o Argentina? Los 300 militares venezolanos (¿tenían permiso de nuestro Congreso?) que llegaron a Buenos Aires con Chávez, ¿estaban a cargo de PDVSA, de la Universidad de las Madres de Plaza de Mayo, del Gobierno de la Ciudad? Nadie aclara nada. Nadie pide explicaciones. Inexplicable.

El canciller Jorge Taiana se apresura a declarar que “el gobierno no tuvo nada que ver con el acto de Chávez en Ferro”. No tuvo nada que ver, pero lo permitió. Permitió que la Universidad de las Madres de Plaza de Mayo invitara al Presidente Venezolano para hacer un acto en contra del presidente de otro país que estaba de visita en un cuarto país. Si el gobierno “no tuvo nada que ver” no debió permitir que la visita de Chávez coincidiera con la de Bush a Brasil y a Uruguay. Una curiosa manera de no tener nada que ver. Inexplicable.

¿Qué ganó la Argentina con esta patoteada de cuarta y a cargo de un tercero, como si no nos diera el cuero para hacerla nosotros? Quizás ganó electores, dicen que somos el país más antiyanki del planeta, dicen que el 92% de los argentinos odian a los EEUU. Razón por la cual no se explica que la mayoría de los argentinos que emigran, lo hagan hacia Norteamérica (a riesgo de vivir indocumentados) y no hacia Cuba o Venezuela. Inexplicable.

¿Qué perdió la Argentina con las diatribas de Chávez en contra de Bush y de los países que lo recibieron? En lo material, probablemente, no pierda nada. Todo quedará como estaba, un poco más deteriorado, pero sin sanciones visibles. Sólo que, “lo esencial, es invisible a los ojos”, decía el Principito de Saint Exupéry. Y aunque no se vea, el prestigio que alguna vez tuviera la Argentina, desapareció. Dejamos de ser creíbles. Dejamos de ser confiables. Perdimos toda noción de hidalguía. Somos irrelevantes. Nos desvanecemos inmersos en la vergüenza. Inexplicable.

Empezamos con el Martín Fierro, y para soñar que todavía somos argentinos, que a algunos todavía nos queda algo de la dignidad de la Argentina que fue y ya no es, recordemos que:
“si la vergüenza se pierde, jamás se vuelve a encontrar”.

PD.: Llamado a la solidaridad; si alguien encuentra la vergüenza y el honor argentinos extraviados en Ferro el viernes pasado, se ruega devolverlos el 28/10/07 en las urnas. Será recompensado con una ¡REPUBLICA!

Gentileza en exclusiva de www.lacajadepandoraonline.com para NOTIAR

3/08/2007

Argentina: "Un tablao" para todo uso...

Por Julio Cirino
http://www.eldiarioexterior.com/noticia.asp?idarticulo=13415

3/05/2007

Con todo respeto, Señor Presidente. Por Malú Kikuchi

Con todo respeto, Señor Presidente, con todo el respeto que me merece su investidura, ¿sería mucho pedirle que Usted demostrara un poco de respeto por los argentinos que no estamos de acuerdo con sus políticas?
Con todo respeto, Señor Presidente, no me gusta que me tomen por tonta. No me gusta que insulten mi inteligencia, sea esta poca o mucha. Y eso es lo que Usted, Señor Presidente, hizo el jueves pasado en el Congreso de la Nación.
Con todo respeto, Señor Presidente, me parece perfecto que enumere sus logros económicos, que son muchos y que nadie puede discutirle. Más allá que no se deben tanto a su gestión como a la bonanza internacional. Pero son una realidad. ¿Nadie le explicó que además de contabilizar lo que se ha hecho se debe hablar sobre lo que se hará? Paro eso, para contarle a la Nación desde el Poder Legislativo los planes para el año que se inicia, es que habla el Presidente en la sesión inaugural del Congreso. Y de eso, nada.


Con todo respeto, Señor Presidente, las sesiones que dio por inauguradas se llaman “ordinarias”, pero se llaman así porque son “comunes, habituales”, no porque son “guarangas”. Y el “de acá”, rubricado por un medio corte de manga gestual, con el que nos instruyó acerca de su sentir hacia el FMI, no fue digno de la investidura presidencial, y fue desagradable para con los ciudadanos.
Con todo respeto, Señor Presidente, la defensa de su curiosa política internacional, me desconcierta. Usted declama su agradecimiento hacia Venezuela y su bizarro Presidente, con el que nos endeudamos cada día un poco más. No aclara que le pagamos intereses sensiblemente más altos que los que le pagábamos al FMI. Y mientras reivindica el accionar del Poder Judicial con respecto al tema AMIA y Embajada de Israel (pedido de detención de ex funcionarios iraníes), su amistad con Chávez, íntimo amigo del líder Iraní, descoloca. Reconozca que es difícil de explicar.
Con todo respeto, Señor Presidente, cuando reivindica su política con respecto a los DDHH, Jorge Julio López sigue desaparecido, hoy, bajo su gobierno, tan ineficiente al respecto que aún, a casi 6 meses del hecho no se sabe nada. Del caso Gerez, ni siquiera Usted se anima a decir algo más que: ¿A quien se le ocurre hablar de auto secuestro?
Se nos ocurre a casi todos los argentinos que no queremos que nos tomen el pelo y nos den trato de tontos. Y, sabe Señor Presidente, hubo terrorismo de estado porque previamente hubo terrorismo de parte de esos “maravillosos muchachos idealistas”. Y todo terrorismo es eso; terrorismo y debe ser igualmente condenado. Sino la reconciliación con justicia nunca llegará.
Con todo respeto, Señor Presidente, Usted habló de dialogar con la oposición, Usted que no dialoga con nadie. Usted, Señor Presidente, habló de pluralidad y de compartir ideas, mientras le decía a la oposición lo que debía hacer. Usted habló de recuperación de la calidad institucional. Y en este punto, discúlpeme Señor Presidente, me siento personalmente agraviada. ¿En verdad Usted cree que hemos recuperado la calidad institucional?
Si lo cree, dejo de respetarlo. Si no lo cree y lo dice, le ruego que me respete como ciudadana que paga impuestos y con ello contribuye a mantener al Estado que Usted administra. Solamente en tiempos de gobiernos de facto se han avasallado las instituciones de manera tan flagrante.
Con todo respeto, Señor Presidente, mientras el facilitador español enviado por el Rey Juan Carlos hace desesperado esfuerzos para que Argentina y Uruguay puedan llegar a un acuerdo, ¿es necesario destratar al Presidente del país vecino desde el Congreso, en cadena nacional, para que se entere todo el mundo? No le ha facilitado la tarea al facilitador.
Con todo respeto, Señor Presidente, para no perder la costumbre, cargó contra los periodistas. También como de costumbre, empezó diciendo: “con afecto, con cariño, les digo…” Prefiero que deje el cariño de lado y me respete. Dijo que a los políticos los votan y a los periodistas, no. Lamento contradecirlo; a los periodistas los vota el público cada vez que los lee, los ve o los escucha. No hay periodismo sin público.
Con todo respeto, Señor Presidente, según Usted “la mayoría de los periodistas no resiste un archivo” y “han ido escribiendo como el viento venía, o de acuerdo con los intereses que debían representar”. No se lo discuto; algunos periodistas se encuadran en su descripción.
También lo hace la mayoría, casi la totalidad de los funcionarios que lo acompañan en su gestión, empezando por Usted. ¿No fue Usted, Señor Presidente, el que calificó a Menem como el mejor Presidente de la historia? ¿No fue Usted Señor Presidente el que fogoneó desde su provincia y ayudado por su mujer desde el senado, la privatización de YPF? ¿Y esa gestión no le valió muchos millones de dólares para Santa Cruz, millones que Usted mandó al exterior?
Con todo respeto, Señor Presidente, ¿dónde están, qué pasó, cuando vuelven los millones de Santa Cruz a la provincia?

Con todo respeto, Señor Presidente, le reconozco que estoy de acuerdo con Usted cuando dice: “la calidad institucional tiene que tener una oposición con propuestas, una oposición con capacidad de debate, con un proyecto estratégico que pueda SUPERAR LA CALIDAD DEL AGRAVIO y que pueda levantar la bandera de las ideas”.

Con todo respeto, Señor Presidente, ¿y si desde el Gobierno se propone en vez de ordenar? ¿Y si desde el Gobierno alguna vez se debate algo, lo que sea, pero se debate? ¿Y si desde el Gobierno se diseña el país del futuro con estrategias claras y a largo plazo y no a como de lugar y corriendo detrás de los acontecimientos? ¿Y si desde el Gobierno se supera la calidad del agravio? ¿Y si desde el Gobierno se deja de creer que cualquier opinión discordante con las políticas establecidas, son un agravio?
Con todo respeto, Señor Presidente, pensar distinto no es agraviar. Es tener una visión diferente de las cosas.
Con todo respeto, Señor Presidente, me comprometo en forma personal, a superar la calidad del agravio; a cambio, agradecería, menos “afecto” y menos “cariño” de su parte y más respeto. No me diga más que me lo dice “con afecto, con cariño, le digo”, dígamelo con respeto. Me lo merezco como ciudadana. No me de trato de tonta. Yo lo respeto por su investidura, respéteme por mi ciudadanía.
Con todo respeto, Señor Presidente. Espero reciprocidad.
Gentileza en exclusiva de www.lacajadepandoraonline.com para NOTIAR