11/29/2006

29 DE NOVIEMBRE

Malú Kikuchi habló en el programa de hoy con el Senador Radical por la provincia de Jujuy, Gerardo Morales; quien comentó que el partido esta en una etapa de recuperación de la institucionalidad y que lo ocurrido en Misiones hace un mes fue un llamado de atención a mejorar la calidad institucional a nivel nacional. Este viernes se reestablecerán las autoridades y luego se pondrá en marcha lo que se ha dictado en la Convención de Rosario: la conformación de la coalición opositora.
Por otro lado dijo que la UCR esta en una situación de crisis por motivos internos al partido pero también porque hay muchas ingerencias de afuera, las cuales pueden darse debido a que el partido esta muy debilitado.


Andrés Cisneros, Ex Vice Canciller, respecto al conflicto por las pasteras dijo que cuando se tiene una concepción de mando u obediencia en la política, los conflictos se manejan de manera errónea y lo menos que hay que caber es envolverse en la bandera porque toda negociación es imposible porque supone una traición a la patria.
Dijo también que la Constitución Nacional prevee que haya política l frente de la Chancillería pero deben ser guiados por el cuerpo diplomático nacional, y actualmente no lo están haciendo, por lo tanto al improvisación acarrea serias consecuencias. Mostramos a nivel internacional una debilidad a la hora de manejar las cuestiones políticas, tanto internas como externas, porque el dialogo no existe y la idea principal parece ser la de derrotar al otro.
Considera que lo que el gobierno debería haber hecho desde el principio era hacer un protocolo del MERCOSUR sobre futuras pasteras, de esta forma nadie podría construir sin la expresa y total negociación del vecino. Esta medida fue tomada en la década del 80 con el conflicto de las hidroeléctricas, el cual se resolvió sin ningún problema.

11/27/2006

Cumplir con la Ley no es opcional, por Malú Kikuchi

El Doctor Néstor Carlos Kirchner, asumió la presidencia de la Nación Argentina el 25 de Mayo de 2003. Como lo establece la Constitución Nacional, artículo 93 (segunda sección, Del Poder Ejecutivo), tomó posesión de su cargo prestando juramento, “en manos del presidente del Senado y ante el Congreso reunido en Asamblea, respetando sus creencias religiosas, de desempeñar con lealtad y patriotismo el cargo de presidente de la Nación y observar y hacer observar fielmente la Constitución de la Nación Argentina”.


¿Qué pasó? El miércoles 22 de noviembre (2006), detrás del atril que utiliza normalmente para dirigirse a la Nación, el Presidente, refiriéndose al crédito otorgado por el Banco Mundial a la empresa Botnia, y a los cortes decididos en consecuencia por los asambleístas de Gualeguaychú, dijo: “Si alguno piensa que hay que ir a reprimir a los hermanos de Gualeguaychú, que lo escriba y que lo diga; yo no lo voy a hacer”.

¿Qué pasó? Los cortes de rutas y puentes para impedir el libre tránsito de personas y mercaderías, son delitos. La Constitución Nacional establece en su artículo 14 que: “Todos los habitantes de la Nación gozan de los siguientes derechos conforme a las leyes que reglamenten su ejercicio; a saber: de trabajar y ejercer toda industria lícita, [...], de comerciar [...], de entrar, permanecer, transitar y salir del territorio argentino...”. El artículo 10 de la Constitución dice que: “En el interior de la República es libre de derechos la circulación de los efectos de producción o fabricación nacional, así como la de los géneros mercancías de todas clases, despachadas en las aduanas exteriores”. Y el artículo 20 le asegura a los extranjeros los mismos derechos civiles que a los ciudadanos.

¿Qué pasó? El Presidente juró cumplir y hacer cumplir estos artículos (y todos los demás) de la Constitución Nacional. Es reconocido como Presidente de la Nación a partir del momento de la jura, ¿porqué no cumple? La ley no siempre es amable ni fácil de observar, pero su cumplimiento no es opcional, es obligatorio. El Presidente debe disuadir a la gente de Gualeguaychú, buenamente de ser posible, o si no, a través de las fuerzas de seguridad, que levanten los cortes.
No sólo porque nos perjudican ante la Corte Internacional de La Haya y ante el resto del planeta, si no, y antes que nada, porque son anticonstitucionales, y el Presidente es el primero que debe acatar lo que indica la Constitución Nacional.

Impedir los cortes de ruta en Gualeguaychú, no es una medida simpática para los entrerrianos, pero es de cumplimiento obligatorio para el Presidente. El Presidente debe saber a esta altura de su gobierno, 42 meses, que ejercer el mando y cumplir con la ley, no es fácil, pero es su deber. ¿Con qué autoridad moral podrá el Presidente requerir que los ciudadanos cumplan con la ley si él no da el ejemplo. El es el Primer Mandatario, aquél que ha sido nombrado por sus mandantes para ejercer el poder por 4 años, y debe ser el primero en acatar lo que establece la Constitución Nacional.

¿Cómo es posible que ante tamaño desacato por parte del Presidente, a lo pactado por el juramento, la ley y la Constitución, nadie repare en ello? ¿Cómo se explica que no haya un fiscal, un diputado, un senador, un ciudadano que no demanden el cumplimiento de la ley por parte del Presidente?

¿Dónde están los fiscales de la República? ¿Dónde están los diputados y los senadores de la República? ¿Dónde están los ciudadanos respetuosos de la República? Quizás las preguntas, como en las encuestas de Misiones, no sean las correctas. Quizás la pregunta correcta sea ¿dónde está la República?

La respuesta es simple; en un país donde el Presidente no cumple con lo que manda la Constitución Nacional ( porque las medidas que debe tomar no son consideradas “políticamente correctas”), la República, no está; la República se desvaneció ante el incumplimiento de la ley.

¿Qué le pasa al Presidente? El martes 21 de noviembre habló, desde el atril, reconociendo que aparecerán “desafíos nuevos, siempre hay demandas, siempre la gente trata de ir mejorando, y eso es lógico, natural, y lo tenemos que lograr con solidaridad, con esfuerzo y sin confrontaciones ¿¿??”(sic). 48 horas después, “confrontaba” calificando al Presidente Tabaré Vázquez de “intransigente”, al Banco Mundial de estar al servicio de los “intereses internacionales”, y a Botnia de manipular al Banco Mundial.

¿Qué le pasa al Presidente? Se va a Nueva York a tocar la campana de Wall Street con la esperanza que vengan a la Argentina inversiones extranjeras. Y desde el atril acusa: “los intereses internacionales han elegido que esta región tiene que ser de alguna manera el basurero de cierta producción e industrias”(sic). ¿Para qué quiere que vengan las inversiones, si van a convertir al país en un basurero?

¿Qué le pasa al Presidente? Siempre desde el atril, aclara: “Fuimos [al Banco Mundial] a defender convicciones. Esto no es un partido de fútbol, si se gana o si se pierde”(sic). ¿ Si no se esperaba ganar ni perder, a qué se fue? Es obvio que Botnia ganó, pero a decir del Presidente, Argentina no perdió. Y aunque no es un partido de fútbol, “va a seguir peleando”, ¿para qué? Demasiado complicado para comprender.

Lo que es fácil de comprender es que hasta ahora, y considerando con todo respeto que no se trata de ningún partido de fútbol, en la Haya: 14 en contra, 1 a favor (juez de parte Argentino); ante el Tribunal del MERCOSUR, la Argentina, reprendida; en el Banco Mundial: 23 en contra, 1 a favor (representante Argentino, que por decencia se tendría que haber abstenido ya que también representaba al Uruguay).

¿Qué le pasa al Presidente? El mundo entero, ¡hasta Venezuela!, votó en contra de la Argentina. No es coherente pensar que el resto del planeta está en contra de la Argentina y que sólo la Argentina tiene, en todo, y siempre, la razón. Algo no funciona todo lo bien que debiera funcionar. Empezando por la política exterior Argentina, que además de pésima, es totalmente incoherente. Lo pésimo y lo incoherente, se solucionan fácil. Se cumple con la Constitución Nacional y todo vuelve al lugar de donde nunca debiera haber salido.

La ley le puede gustar al Presidente, o no. La ley puede estar de acuerdo con los pensamientos más íntimos del Presidente, o no. La ley puede estar de acuerdo con las políticas explícitas del Presidente, o no. Pero cumplir con la ley, no es opcional. La ley es de cumplimiento obligatorio.

Según el diccionario, ley es: “regla y norma constante e invariable de las cosas”.Alguien tendría que explicárselo al Señor Presidente.

Con respeto. “Con cariño”.

Gentileza de www.lacajadepandoraonline.com para NOTIAR

11/21/2006

21 DE NOVIEMBRE

Malú Kikuchi habló ene l programa de hoy con Carlos Raimundi, Presidente del ARI, quien comentó que están conversando con distintas fuerzas coherentes y consecuentes con el contrato moral y con las reglas del financiamiento para la política. Han designado a sus máximas autoridades para que sea claro que es un diálogo institucional. Dijo también que la gente no debe preocuparse por el acercamiento con el socialismo porque mantendrán lo que consideran es su principal capital: la coherencia.
Por último agregó que se debe trabajar muy duro para rescatar principios y valores que están aletargados, pero que por suerte están, en el seno de la sociedad y que aún no han encontrado legitimidades ni liderazgos.
Domingo Dinucci, Ingeniero Agrónomo, dijo que los acuerdos de precios han sido, a lo largo de la historia argentina, un fracaso y los de este gobierno no son la excepción. Cree que el problema de la intervención es que cuando se ponen restricciones, es decir cuando se le impide al productor participar del libre juego de oferta y demanda que genera el precio, las cosas se distorsionan.Considera que lo único que se busca es dibujar un índice de inflación acorde a los intereses del gobierno que no quiere que el índice inflacionario llegue al 10% en el 2007 y no le importa el precio que deben pagar los productores para lograr ese objetivo.

11/20/2006

Disculpe Señor Presidente: pero todo cambia, por Malú Kikuchi

Disculpe Señor Presidente, pero, d.M. (después de Misiones, 29/10/06), como en la canción favorita de Mercedes Sosa, “Todo cambia, todo cambia” (autor Julio Numhauser). Permítame recordarle los primeros versos:

“Cambia lo superficial,Cambia también lo profundo;Cambia el modo de pensar,Cambia todo en este mundo”.


¡Quién lo hubiera dicho! El cambio vino de la mano de una provincia alejada, pobre y muy necesitada. Una provincia donde su imagen positiva, según los encuestadores, era del 70% y la de su discípulo, el gobernador Rovira, del 50%. ¡Y el cambio vino de la mano de un obispo jubilado, con remera blanca y un enorme San Miguel pintado a mano!


El cambio lo gestaron el obispo, la CTA, los evangelistas, la UCR, el rabino Bergman, el PRO, monjas y sacerdotes, el PJ, y sobre todo, el digno Pueblo Misionero. Misiones votó, y se produjo el cambio. ¡Y qué cambio!



Lo increíble, Señor Presidente, es que el que aparentemente cambió, es Usted. Por supuesto, Señor Presidente, Usted no ha mencionado a la provincia de Misiones, como si ésta no formara parte de la Nación Argentina, pero sus decisiones de los últimos días, dan cuenta de que el mensaje ha sido recibido. Le llevó unos días reaccionar. Como de costumbre, cuando algún suceso lo descoloca, guarda un silencio total, y después, actúa. Actuó.



En un gesto de absoluto respeto hacia el federalismo consagrado en el primer artículo de la Constitución Nacional, Usted, Señor Presidente, le ordenó al gobernador Fellner de Jujuy, que se bajara de su intento de reelección indefinida. Con el mismo respeto hacia la autonomía de las provincias, le ordenó al gobernador de Buenos Aires, Felipe Solá, que retirara de la Justicia el pedido para ser habilitado para un tercer mandato. Tanto Fellner como Solá, acataron y cumplieron. ¡Viva el federalismo!



Aparentemente, d.M., en nuestra Argentina, y por orden suya, se acabó la “rerrerre”. Gobernadores como Alperovich (Tucumán), Rodríguez Sáa (San Luis), -siguen nombres y provincias-, se ofrecen para cambiar sus respectivas constituciones y terminar con la reelección indefinida. Dicen que se acaba, ¡ojalá!, también para los intendentes. Gracias, Señor Presidente. En serio, ¡gracias! ¿Y Santa Cruz, para cuando?



También d.M., la senadora Cristina Fernández, con un buen proyecto de ley, lo saca del brete de la Corte Suprema. Una Corte que según la Constitución Nacional debe tener 9 miembros, y que según un decreto de su autoría ( Nº 222/03), lo obliga a nombrar en un plazo no mayor de 30 días, al miembro de la Corte faltante. La Corte, sin embargo, lleva demasiado tiempo con sólo 7 jueces (implica una mayoría de 5), lo que les impide trabajar. En vez de cumplir con la ley, se modifica la ley, pero por lo menos, esta modificación no es mala (volver la Corte a 5 miembros).



Suponemos que la senadora Fernández consultó con Usted el proyecto de ley, dicen que tienen una buena relación política. En la misma línea, la senadora Fernández convenció al senador Pichetto de no presentarse una vez más, como miembro del Consejo de la Magistratura, para no insistir con la “rerrere” en ningún estadio gubernamental. Gracias, Señor Presidente; la renovación de las personas hace a la República. Gracias, aunque todo esto haya sido forzado por la estrepitosa derrota en la elección Misionera.



Los milagros d.M., se suceden. Luis D´Elía, el piquefuncionario funcional a sus designios políticos, comete el error de apoyar a Irán en contra de lo que opinan la Justicia y la Cancillería Argentinas. Y Usted, Señor Presidente, lo obligó a renunciar a esa subsecretaría (que nunca se supo de qué se trataba, más allá de saber que contaba con un presupuesto anual de $300 millones, nuestros). Lo obligó a renunciar, y ¡gracias por ello! Lo obligó a renunciar por algo que dijo, no por algo que hizo.



Y aceptando que fue un disparate lo del apoyo (de palabra) a Irán, tomar una comisaría, boicotear estaciones de servicio y atentar contra la propiedad privada (campos de la Forestal Andina creyendo que eran tierras de Tompkins en Corrientes), fueron acciones mucho más graves que no tuvieron ninguna sanción de su parte. Insisto, Señor Presidente, ¡milagros d.M.! De todas formas, el Gobierno Argentino está mejor sin D´Elía.



En tan poco tiempo, sólo 3 semanas, ¡cuántos cambios! Según el diccionario, “cambiar” quiere decir, dejar una cosa o situación para tomar otra, frecuentemente su contraria. Es lo que Usted, Señor Presidente, está haciendo. Y muchos Argentinos le estamos agradecidos. Aunque, pensándolo bien, ¿quién fue el inventor de la “rerrerre”? Usted, Señor Presidente. ¿Quién cambió dos veces la Constitución de su Provincia para ser reelegido por los siglos de los siglos? Usted, Señor Presidente.




¿Quién fue a Misiones y abrazando al Gobernador Rovira pidió al Pueblo que lo apoyara en su intento reeleccionista? Usted, Señor Presidente. ¿Quién nombró funcionario a D´Elía después que éste tomara la comisaría 24? Usted, Señor Presidente. ¿Quién sostuvo con entusiasmo a D´Elía mientras éste escrachaba a Shell, o aparecía al lado de Chávez en la contra cumbre de Mar del Plata, u organizaba la fracasada contra marcha del 31 de agosto de este año para desmovilizar la marcha de Blumberg? Usted, Señor Presidente.



Se agradece el cambio d.M., Señor Presidente. Pero es difícil dejar de recordar quién comenzó el trastorno. Insisto, se agradecen los cambios, deseamos que se profundicen y que se recupere la República, pero teniendo siempre en claro que ha sido Usted, Señor Presidente, el responsable por la pérdida de las instituciones.



Decía Ramiro de Maeztu, “Cualquier hombre, por caído que se encuentre, puede levantarse; pero también caer, por alto que parezca”(Acción Española 16/7/1932). Cosas que suceden, Señor Presidente. Ayer se ganaba, hoy se pierde. Nada es para siempre. El domingo 28 de octubre de 2007, se acerca. Quizás, el cambio definitivo también se acerque.



Empezamos recordándole una canción, nos despedimos con otra, (Rubén Blades, Pedro Navajas, Siembra, 1976)


“La vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida, ¡ay, Dios!Pedro Navaja...”
Disculpe, Señor Presidente, con respeto. Con el profundo respeto que nos merece su investidura.




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11/13/2006

La Corte: ¿9, 7 o 5?

La Constitución Nacional, en su Sección Tercera, del “Poder Judicial”, artículo 108, dice que: “El Poder Judicial de la Nación será ejercido por una Corte Suprema de Justicia, y por los demás tribunales inferiores que el Congreso establezca en el territorio de la Nación.”


Queda debidamente aclarado, sin margen para la duda, que la Corte es la cabeza de uno de los tres Poderes sobre los que se asienta la República.


De acuerdo con la historia de la patria, la Corte tuvo un nacimiento difícil y tardío. Logra un largo tiempo de estabilidad, que concuerda con los años de la prosperidad Argentina, y sufre cambios bruscos y poco republicanos en los últimos 60 años, que concuerdan con el tiempo de la decadencia Argentina. El devenir de la Nación está estrechamente ligado al destino de la Corte Suprema de Justicia. Cuando la Corte es autónoma del Poder Ejecutivo, cuando sus miembros son idóneos y la estabilidad de los mismos sólo depende de su accionar, la seguridad jurídica existe.



De la seguridad jurídica dependen las inversiones internas y externas, por lo tanto el crecimiento de la Nación. De la seguridad jurídica depende la confianza de las personas hacia un país, por lo tanto una mejor calidad de vida para los que la habitan. La seguridad jurídica está en la base de la grandeza de un país, y ésta, en gran medida, emana en forma directa del accionar de la Corte.



¿Qué es la Corte Suprema de Justicia de la Nación? “La Corte se auto define: intérprete final de la Constitución Nacional y Tribunal de garantías constitucionales”, dice el Dr. Jorge Vanossi. Los fallos de la Corte no pueden ser apelados. La Corte puede declarar nula una ley del Congreso (único órgano habilitado para hacerlo). Los miembros de la Corte deben tener un mínimo de 8 años en el ejercicio de la profesión de abogados y cumplir con los demás requisitos que se le exigen a un Senador (30 años de edad, 6 años de ciudadanía, etc.) Los elige el Presidente de la Nación con acuerdo del Senado. A los 75 años deben revalidar el nombramiento. Sólo el Senado puede remover a un miembro de la Corte a través de un juicio político.


Después de dar muchas vueltas a lo largo de la historia, finalmente, la Corte y sus funciones se establecen en la Constitución Nacional de 1853. Ahí se dicta que los miembros de la Corte han de ser 9 jueces y 2 fiscales. Ese Tribunal nunca se constituyó. Después de la reforma de 1860, cuando Buenos Aires se suma al resto del país, se decide que el número de miembros de la Corte se estipule por ley. La ley Nº 27 establece el número de jueces de la Corte en 5 jueces y 1 fiscal.



El 18/10/1862, el presidente Bartolomé Mitre, mediante un decreto, nombra a los integrantes de la primera Corte. La Corte entra en funciones el 15/01/1863. La componen: Francisco de las Carreras (Presidente), Salvador María del Carril, Francisco Delgado, José Barros Pazos, José Benjamín Gorostiaga y Francisco Pico como Procurador General. Todos ellos nombrados por Mitre. Ninguno de ellos amigo de Mitre. Ninguno de ellos simpatizante del partido político de Mitre. Esa primera Corte marcó el derrotero de las Cortes que le siguieron, todas ellas autónomas del Poder Ejecutivo. La Argentina, creció. Creció de tal manera y tan rápido, que fue el asombro del mundo, la meca de los inmigrantes, el símbolo de un posible mundo mejor.


1930. Hasta 1930, en una Argentina que no sabía de golpes de Estado, el Presidente de la Corte era elegido por el Presidente de la Nación. A partir de ese año y hasta hoy, el Presidente de la Corte es elegido por los miembros de la misma. El General José Félix Uriburu derroca el 6/9/1930 al Presidente Irigoyen. Rompe el proceso institucional. No cambia a ningún miembro de la Corte. En febrero de 1946, Perón es votado Presidente de la Nación.



La Corte estaba compuesta por: Roberto Repetto, Antonio Sagarna, Benito Nazar Anchorena, Francisco Ramos Mejía, y Tomás Casares, este último había sido nombrado en 1944 con el consentimiento de Perón. Los 4 primeros jueces son llevados a juicio político en junio de 1946 acusados de haber avalado los gobiernos de facto de Uriburu (1930/1932) y los gobiernos militares que se suceden a partir del 4/6/1943.



El detalle curioso es que Perón había formado parte del gobierno del Gral. Ramírez como Secretario de Trabajo y Previsión, cargo que siguió detentando durante el gobierno del Gral. Farrell, además de ser Ministro de Guerra y finalmente Vicepresidente de la Nación. Pero Perón tenía mayoría en el Senado y las curiosidades no se tuvieron en cuenta. Los 4 jueces de la Corte fueron removidos y en su lugar se nombraron amigos del Presidente. Desde entonces, ni la Corte ni el país fueron los mismos.


Siguieron los golpes militares y los gobiernos electos. Militares y civiles nombraron sus propias Cortes, con muy pocas excepciones. La seguridad jurídica y la confianza en el país, fueron decayendo. La Argentina dejó de lado sus instituciones y se puso de moda el “vale todo”. En 1958, la Revolución Libertadora por ley Nº 15.271 subió el número de jueces de la Corte a 7.



En 1966, el Gral. Onganía por ley Nº 16.895, volvió los miembros de la Corte a 5. Menem en 1990, por ley Nº 23.774 elevó el número a 9. Al ser 9 los miembros de la Corte, la mayoría se fija en 5. Hoy hay solamente 7 jueces en la Corte y el Presidente se niega a nombrar a los dos faltantes, a pesar de ser el autor de un decreto que lo conmina a hacerlo en un plazo de 30 días. La Corte alega que no puede funcionar con 7 miembros si la mayoría es de 5.



La Senadora Fernández de Kirchner presenta un proyecto de ley que aparece como la solución ideal al problema. Se propone derogar la ley 23.774, volver los miembros de la Corte a 5 y mediante una “disposición transitoria”, esperar a que naturalmente, por renuncia o fallecimiento se acceda al número propuesto.


Mientras, la mayoría se establece en 4 (cuando los jueces sean 6 sigue en 4) y finalmente, con 5 magistrados, la mayoría volverá a 3. Es una buena solución. El tema central es que el número de miembros no es de tanta importancia, lo vital es la calidad de los jueces, su idoneidad, y por encima de todo, su autonomía con respecto del Ejecutivo.



Una Nación es tan respetada y respetable como lo es su Corte Suprema de Justicia. Por supuesto que todos los juristas han de tener un número ideal y deseable de miembros para el buen funcionamiento de la Corte; ese número puede ser de 9 o de 7, o de 5. Hay países altamente desarrollados y con total seguridad jurídica que tienen Cortes de 15 jueces (Japón). No es el número, son los jueces. No es el organismo, es la independencia con la que el organismo se maneja.


El proyecto de ley de la Senadora Fernández, es bueno. Es de esperar que los actuales jueces de la Corte sean igualmente buenos para la República. Los jueces de la Corte no se podrán cambiar el 28 de octubre del 2007. Han de ser
intachables desde todo punto de vista, sus nombramientos deben ser de por vida. Los gobernantes de las sucesivas administraciones se cambian mediante el voto, cada 4 años. Los jueces de la Corte, no. Eso dice la Constitución Nacional.

No siempre se cumple. Y cuando no se cumple, a la Argentina, le va mal.
Decía Mitre, el que nombró la primera Corte: “Debemos tomar a la República Argentina tal cual la hicieron Dios y los hombres, hasta que los hombres, con la ayuda de Dios, la mejoren”. No es el número, son los hombres.
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13 DE NOVIEMBRE

Malú Kikuchi habló en el programa de hoy con Vicente Massot, Periodista, quien comentó que si bien lo ocurrido en Misiones fue un paso muy importante para el país lo importante es ver qué sucederá de ahora en más. Considera que el Presidente reacciona porque sabe que es el gran perdedor, y perdió esta batalla por intentar nacionalizar algo que a nadie le llamaba demasiado la atención; la gente no cambia por lo sucedido, quienes reaccionan son los que integran la superestructura política y la gente politizada porque es la que sabe qué paso y qué es lo que estaba en juego. Por último dijo que hay un país que no cambio y una economía que no cambió, como tampoco cambio el anclaje que es fundamental para el gobierno.


Jorge Raventos, Ex Vocero de Cancillería dijo que "el día menos pensado" para el gobierno fue el día en que el FUD ganó las elecciones en Misiones, ya que tenia la idea de un proyecto de reelección eterna pero por suerte apareció el voto popular para revertir ese panorama. Considera que Kirchner se dio cuenta que debe cambiar su estrategia a mitad de camino, debe sacarse de encima el tema de la reelección lo antes posible porque ya ha sido sancionada por la sociedad. Por lo tanto se encuentra en una retirada rápida y desordenada, sale a decir lo que sea, propone un juego de marketing respecto a las candidaturas para 2007 con el objetivo de que la gente deje de hablar de Misiones. Considera que el agitar la figura de Cristina Kirchner es una maniobra distorsionista para poder salir de los temas centrales y tratar temas secundarios.

11/09/2006

9 DE NOVIEMBRE

Malú Kikuchi habló en el programa de hoy con Claudio Boada, Presidente del Centro de Educación al consumidor, quien comentó que el monto de $869 para la canasta total de una familia tipo anunciada por el INDEC es totalmente irreal ya que según los relevamientos del Centro los precios siguen aumentando y de ese monto solo $395 están destinados a la alimentación familiar.
Dijo también que han presentado denuncias de consumidores sobre los aumentos en las prepagas para el 2007, que van desde un 18% a un 25%, y actualmente están trabajando sobre la estructura de costos para ver si los aumentos que se pretenden son o no razonables.

Juan Carlos Blumberg
dijo que la reunión que estaba planeada para el día de ayer con el Ministro Arslanian fue suspendida sobre la hora, considera que es una falta de respeto ya que estaba pautada desde hacía dos semanas. El objetivo de la reunión era comparar estadísticas ya que las que sostiene el Ministro no concuerdan con la realidad, y su ausencia demostró que tiene miedo a debatir.
El próximo paso que dará la Fundación será una conferencia de prensa para que las víctimas y sus familias puedan expresarse, deben hacerlo de manera particular porque al gobierno parece interesarle el tema seguridad, basta con recordar lo sucedido en San Vicente para que nos demos cuenta que el Estado está ausente y que el Ministro no es capaz de cubrir sus responsabilidades.

11/06/2006

6 DE NOVIEMBRE

Malú Kikuchi habló en el programa de hoy con Néstor Roulet, Vicepresidente de CRA, quien comentó que le sector agropecuario no comparte las herramientas que utiliza el gobierno para combatir la inflación. La herramienta que pretenden es aprovechar los precios internacionales para dejar de hacer concentración de riquezas. Por ultimo dijo que consideran que en un país donde el corto plazo es un día, el mediano plazo es una semana y el largo plazo solo unos meses no se puede producir y nadie querrá invertir en base a tantas incertidumbres.
Gonzalo Peltzer, Director del Diario “El Territorio” de Misiones, dijo que el pueblo misionero no pensaba en las repercusiones que podían llegar a tener las elecciones ya que solo focalizaban su atención en conseguir vencer una dictadura civil que se estaba instalando en la provincia; de no ganar las elecciones el FUD se hubiese instalado un sistema despótico muy difícil de sacar y que hubiese durado alrededor de 20 años.
Dijo también que el ex gobernador Rovira gastó 73 millones de pesos (enviados desde el gobierno nacional) en 10 días de campaña; la lealtad de Kirchner para con Rovira tiene que ver con la mala información que se le brindaba al Presidente, ya que hasta la opinión publica se hizo cargo del problema, Peltzer se pregunta ¿cómo es posible que el Presidente no se haya enterado del tema Misiones?

El silencio de los responsables, por Malú Kikuchi

El silencio, ¡qué tema! Según el diccionario, silencio, quiere decir abstención de hablar, falta de ruido. En una acepción más literaria, la Real Academia Española añade: entregar algo al silencio, significa, olvidarlo, callarlo, no hacer más mención de ello. De todos modos, silenciar un hecho, no implica que el hecho desaparezca, es más, a veces potencia el efecto contrario. De tanto silenciar una derrota, ésta se magnifica.


Existen tantas clases de silencios como actitudes humanas a las que los silencios responden. Hay silencios calculados y hay silencios compartidos. Existen silencios neutros y ásperos y belicosos y dulces y respetuosos. Y existen silencios tercos, y existen silencios miedosos. Hay silencios mucho más elocuentes que el más elocuente de los discursos. Hay silencios que gritan.



Página 12, jueves 7 de abril de 2005, sección de sicología, firmada por Carlos Ahschut, Profesor en la UBA, FLACSO y la Universidad San Andrés (de un trabajo titulado “Silencio, silenciosamente”) : “Podríamos llamar silencio al estado de cosas en que se escucha y se conviene en no hablar de algunos aspectos de la realidad.




Es un silencio vital en que conviven lo racional y lo emotivo. [pero]Cuando el miedo es sobrecogedor, se renuncia a hablar abiertamente. Cuando está en juego la pérdida de derechos, de posición y carrera, surge el silencio absoluto”. Una teoría sicológica dice que en Occidente se le tiene miedo al silencio, tanto miedo que se lo llena de ruidos para no pensar. ¿Pero qué pasa si el silencio es el síntoma del miedo? Pareciera ser una posibilidad.



Domingo 29 de octubre 2006, la provincia de Misiones enfrenta su misión más difícil, decidir entre la democracia y el autoritarismo. Elección ardua viniendo de un Pueblo pobre al que los diferentes poderes han decidido sobornar. Pretenden comprarlo con comida, prótesis dentales, créditos (convertidos en regalos de ganar el SI), amenazas, pedazos de carne, apretadas, y en última instancia, fraude. Le prometen $1.500 millones en obra pública a cargo del Estado Nacional y le dan $20 millones en efectivo, entregados por la ministro Alicia Kirchner y por Sergio Massa (ANSES). Y fabrican 30.000 DNI falsos, para que los usen paraguayos alquilados a $100 por persona. Y además, se pretende que voten muertos, en perfecto estado de salud, lo mismo que longevos personajes con más de cien años. ¡Qué logro para el ministerio de Salud de la provincia!



A pesar de la explícita ayuda del poder Nacional, a pesar de la visita a Misiones del Presidente, a pesar de los encuestadores al servicio del poder, a pesar de todo, inesperadamente, gana el NO. Gana la dignidad de los Misioneros, gana la democracia, gana la alternancia, gana el respeto por las instituciones republicanas. Gana con el NO la esperanza de todo un país. Frente Unidos por la Dignidad (NO), 56,6%; Frente Renovador (SI), 43,4%. El Frente liderado por Monseñor Piña se llama como debe llamarse, apela a la dignidad, cualidad que demuestran tener los Misioneros. ¿Pero porqué el Frente de Rovira se llama “Renovador” si la pretensión es perpetuarse? Difícil de comprender. La derrota de un aliado incondicional como Rovira, también es difícil de comprender para el Gobierno Nacional. Difícil de comprender; difícil de aceptar.




El domingo 29/10/06, perdió Rovira. El silencio de la Rosada al respecto, dice que también perdió el Presidente. Como siempre que algo lo incomoda, lo mantiene en vilo o lo irrita, el Presidente se refugia en Santa Cruz. Le cuesta volver a Buenos Aires si la realidad que lo espera no le es grata. La elección fue el domingo. El Presidente llegó a la
capital recién el martes.


El tema Misiones fue ignorado oficialmente por él y por sus voceros habituales. Los encuestadores del poder se pusieron el disfraz al hombre invisible y ellos también callaron. Los encuestadores del poder, sabían que el SI perdía. Sabían del fraude, ¿para qué montar un fraude si se está ganando? Sabían y no lo dijeron, o apostaron al triunfo del fraude. Tanto el Ejecutivo que apoyó a Rovira, como los encuestadores que se “equivocaron” feo y por mucho, le deben una explicación a la sociedad.



Todos callan. Los responsables se callan. El tema no se toca. De eso no se habla; es la orden. Y la orden se cumple a rajatabla. Misiones no existe, no es una provincia Argentina. En Misiones no se votó. ¿Quién lo conoce a Rovira? En Misiones no se perdió. Pero no importa cuanto se calle, en Misiones, el Gobierno Nacional perdió. PERDIO. Y el silencio lo grita, lo magnifica. Más callan, más grande se hace la derrota; más callan y más se sabe cuánto les duele la derrota.



Dicen que “responsable” es aquel que da respuesta. Los responsables de la derrota sufrida por los Gobiernos Provincial y Nacional, en Misiones, no dan respuesta. ¡Hubiera sido tan simple felicitar al Pueblo Misionero por haber votado! Ni siquiera era necesario hacer mención a vencedores y vencidos. Pero el Presidente estaba demasiado involucrado en la elección para poder dar esa respuesta mínima. Y a pesar que el mes de octubre no ha sido un buen mes para el Presidente: recordar los episodios del Hospital Francés y su foto con Sergio el “Tuta” Muhamad; la batalla de San Vicente con el cajón de Perón esperando en una ruta; lo de Misiones es peor, duele. Asusta.



Es la primera derrota explícita del Presidente que le ha dedicado los 41 meses de su gobierno a acumular poder. Un poder enorme, más allá de los límites impuestos por la Constitución Nacional, que sin embargo, no le han servido para ganar una elección provincial por la que se había jugado.



¡Tanto poder y no poder! No poder ganar una elección provincial en un lugar donde el Presidente tiene el 70% de imagen positiva y el Gobernador 50%, según los encuestadores (del poder, que no todos dan esas cifras). Entonces, aparece el miedo. Si no se pueden comprar las voluntados de un Pueblo careciente, ¿cómo se hace la “nueva política”?



Si la gente no se vende, si los habitantes se convierten en ciudadanos, si un obispo con un San Miguel pintado en la remera puede contra todo un aparato político, ¿cómo se gobierna? Y aquí, entra a jugar el miedo. Y el miedo llama al silencio. Y el silencio habla del miedo y del desconcierto.



El silencio de los responsables de la derrota electoral, el silencio de los que no dan respuesta, es el más grande tributo a la dignidad corajuda de Misiones.



Cuando escaseaban las esperanzas, Misiones le dio la razón a Bertold Brecht cuando decía, “nada debe parecer imposible de cambiar.”


El domingo 28 de octubre (¡qué coincidencia!) 2007; el cambio es posible. ¡Gracias Misiones!


Gentileza en exclusiva de
www.lacajadepandoraonline.com para NOTIAR


11/02/2006

02 DE NOVIEMBRE

Malú Kikuchi habló en el programa de hoy con Miguel Angel Cortés, Licenciado en Derecho, Diputado por Valladolid y Portavoz Adjunto del Partido Popular en la Corte Española, quien comentó que al parecer Rodriguez Zapatero pediría en la Cumbre Iberoamericana, que comienza mañana en la ciudad de Montevideo, el apoyo a América Latina para su política con el grupo terrorista ETA.
Considera que de ser así será un precedente grave para la Comunidad Internacional ya que estaría rectifcando las posiciones terroristas. El gobierno español realizó el mismo pedido a la Unión Europea y gracias a Dios no tuvo éxito en su objetivo. También considera que la Cumbre tiene como objetivo coordinar políticas para resolver problemas muy importantes que están afectando a los países de habla española y portuguesa, porque da la impresión que éstos están al margen de la toma de desiciones.